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¿Quiénes son las monjas de Loudun? El caso de las monjas de Loudun es uno de los más conocidos casos de posesión demoniaca.
En 1634 las monjas del convento de Loudun, Francia, presentaron supuestos síntomas de posesión demoniaca: se contorsionaban, hablaban en latín (en realidad nada raro para una monja de la época), se insinuaban sexualmente y se desvestían frente a quien estuviera presente.
Ante estos síntomas, muchos sacerdotes comenzaron a llegar al lugar, donde pasaron meses realizando exorcismos públicos. Al paso del tiempo y tras sucesivas investigaciones, se supo que las posesiones eran fingidas y que, en un principio, se inventaron para hundir al sacerdote Urbain Grandier, que había caído de la gracia de la madre superiora y finalmente fue quemado en la hoguera.
Después, viendo que en Loudun se estaba lucrando con los turistas que iban a ver los exorcismos, éstos se prolongaron todo el tiempo posible.
Es decir, todo fue un ardid político diseñado para dañar a una persona y del cual se obtuvieron beneficios económicos extra.
Del caso de las monjas de Loudun, se hizo una de esas tantas películas terroríficas que se anuncian como "basada en hechos reales", asusta bastante la verdad, aunque estas supuestas posesiones ni siquiera incluyan los síntomas "oficiales" de posesión que suele incluir la Iglesia Católica en su ritual de exorcismo (porque aparentemente esta es la religión que más obsesionada está con las posesiones demoníacas y bajo la que mueren más personas durante el ritual).
Después de la película en blanco y negro sobre las monjas de Loudun, han aparecido muchas otras cintas sobre exorcismos basados en hechos reales. Y aunque la gente se queda con la idea de veracidad de estos casos, lo cierto es que si uno indaga un tanto se dará de que las historias detrás de estos casos están más ligadas a profundos problemas personales más que a posesiones de seres malvados sobrenaturales.
De esto muchos ejemplos:
-El exorcista. Quizá la más famosa de todas las películas de posesión, basada en la supuesta posesión de un niño llamado Ronald Hunkeler. El muchacho en cuestión tenía 13 años cuando comenzó a tener síntomas de posesión (básicamente lenguaje altisonante, fuerza sobrenatural y ejercicio de violencia); sus padres desesperados acudieron a toda clase de ayuda, incluyendo el apoyo psiquiátrico de la Universidad de Georgetown, al ver que nada funcionaba mandaron traer a un sacerdote católico a pesar de que ellos eran luteranos. El sacerdote practicó varias veces el ritual de exorcismo, durante varios meses, al final, según la versión del propio Ronald, el arcángel Miguel se le apareció, le habló y lo libró del demonio.
Tiempo después de que la novela vendiera trece millones de copias y la película recaudara una cantidad obscena de dinero, un periodista decidió investigar los hechos reales. Resulta que el tal Ronald siempre había tenido una conducta psicópata, amedrentando a sus compañeros, atacando a la gente, siendo sádico con los animales. Hasta que un día sus padres se hartaron y lo confinaron en casa. Hasta la fecha no se sabe si el muchacho fingió estar poseído, o si sus padres llevaron a cabo el exorcismo estando realmente convencidos de la posesión, aunque al parecer el ritual espantó lo suficientemente al muchacho como para medianamente enmendar su conducta y mudarse a otro pueblo para comenzar de nuevo.
-El exorcismo de Emily Rose. Basada en el caso de una chica poseída llamada Anneliese Michel, quien un día comenzó a presentar espasmos involuntarios y alucinaciones demoníacas, le diagnosticaron epilepsia y posteriormente esquizofrenia, aunque ella muy pronto se convenció de que estaba poseída por varios demonios, entre ellos Caín y Hitler. Sus padres llamaron a dos sacerdotes para que le practicaran un exorcismo, a petición de la propia Anneliese, quienes llevaron a cabo exorcismos durante varios meses.
A lo largo de los exorcismos Anneliese dejó de tomar sus medicamentos, por lo que su psicosis aumentó de forma severa, además dejó de comer y comenzó a hacer ejercicio de una forma compulsiva llegando a realizar hasta 300 sentadillas diarias. Finalmente murió de inanición y se juzgó tanto a sus padres como a los sacerdotes, aunque fueron condenados solamente a servicio comunitario cuando el jurado se convenció que de que la chica realmente estaba poseída debido a las grabaciones en donde ella se escucha con diferentes voces, una de ellas con acento alemán (por supuesto todos deberíamos saber que el conjunto de nuestras cuerdas vocales puede realizar infinidad de voces y tonos, y que nuestra propia voz depende mucho del aprendizaje obtenido en nuestra familia y otros entornos).
-Posesión satánica. Basada en el caso de un niña que según su papá quedó poseída por el espíritu maligno de una cajita llamado Abizu. Lo cierto es que nunca se han dado detalles de esta historia, todo lo que sabe es que la dueña original murió y la persona que heredó la caja comenzó a escuchar ruidos extraños en su casa, de manera que vendió la dichosa caja, la cual pasó de dueño en dueño por los extraños sucesos que provocaba. Al final el objeto terminó en un museo como antigüedad.
Y a todo esto, ¿cuáles se supone que son los síntomas de una posesión satánica? Básicamente son cuatro:
1. Hablar en lenguas desconocidas. Cosa que no ha pasado en la mayoría de los casos de películas basadas en hechos reales. Aunque las víctimas llegan a hablar algunas palabras extranjeras, la mayor parte sólo cambia su propio acento.
2. Mencionar cosas lejanas u ocultas. En ninguno de estos casos se ha referido que las víctimas adivinaran el futuro o el pensamiento de las personas que los rodeaban. Salvo en el caso de Annliese, quien se dice predijo el día en que moriría, lo cual no es extraño, pues muchos animales y no sólo los humanos, son capaces de prever hasta cuando su cuerpo aguantará una enfermedad o situación extrema, saben pues en circunstancias extremas cuando morirán.
3. Tener fuerza física superior. Nada fuera de lo común pues la adrenalina generada bajo ciertos estados alterados de conciencia, provoca precisamente la sensación de tener fuerza sobrenatural y aumenta la energía, lo cual no evita que las víctimas sufran fracturas y lesiones diversas sin que se den cuenta. Nuevamente Anneliese es ejemplo de esto, pues al morir los huesos de sus piernas estaban por completo destrozados.
4. Mostrar aversión visceral hacia la Virgen y objetos religiosos. En numerosos casos los rituales de exorcismo fueron negados porque las víctimas no presentaban estos síntomas, resulta curioso que comenzaran a presentar esta característica justamente después de que les dijeran que no eran candidatos por no contorsionarse ante los objetos religiosos católicos. También resulta bastante extraño que sólo se genera aversión a estos objetos y no a los de cualquier otra religión.
Dejando a un lado las películas, sí parece haber un perfil para las personas poseídas: suelen ser personas fervientemente religiosas, con terribles conflictos emocionales o existenciales, la mayoría presenta leve paranoia y visiones demoniacas, así como percibir aromas fétidos (común en enfermedades mentales como el Alzheimer por ejemplo).
Se piensa que la creencia de estar poseído es un estado de psicosis por la que llegan a pasar algunas personas religiosas en momentos de crisis y ansiedad, y que en muchos casos puede acentuarse por los rituales de exorcismo. Lo cual indicaría que la posesión demoniaca se podría catalogar de un estado avanzado de enfermedad mental previa y que requiere tratamiento psiquiátrico.
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Etiquetas: Quiénes son las monjas de Loudun